- En la última década, se ha revisado la definición de accidente cerebrovascular (ACV) y se han realizado importantes avances para su tratamiento y prevención. Para el ACV isquémico agudo, la adición de trombectomía endovascular de la oclusión proximal de la arteria grande a la alteplasa intravenosa aumenta la independencia funcional para un quinto adicional de pacientes.
- Los beneficios de la aspirina para prevenir el ictus isquémico recurrente temprano son mayores que los reconocidos previamente. Otras estrategias incluyen anticoagulantes orales directos como una alternativa a la warfarina para la fibrilación auricular y la colocación de endoprótesis carotídeas como una alternativa a la endarterectomía para la estenosis carotídea sintomática.
- Para la hemorragia intracerebral aguda, se están realizando ensayos para evaluar la efectividad de la reducción de la presión arterial aguda, la terapia hemostática, la cirugía mínimamente invasiva, la terapia antiinflamatoria y los métodos de neuroprotección. Las terapias farmacológicas y de células madre prometen facilitar la regeneración cerebral, la rehabilitación y la recuperación funcional.
- A pesar de la disminución de las tasas de mortalidad por ACV, la carga mundial de ACV está aumentando. Se requiere un enfoque más integral para la prevención primaria del accidente cerebrovascular que se dirija a las personas en todos los niveles de riesgo y se integre con estrategias de prevención para otras enfermedades que comparten factores de riesgo comunes.
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